ampharou
viernes, mayo 13, 2005
Pecados.
Pero también está la otra envidia, esa que aflora cuando, aún empeñándonos, no somos capaces de conseguir aquello por lo que nos afanamos, y sin embargo, asistimos desdichados a cómo otros lo alcanzan apenas sin pestañear... Son esas personas tocadas por la fortuna, los que siempre están en el sitio adecuado en el momento oportuno... esos que no arriesgan, no juegan... pero siempre ganan. Prefiero estar lejos de estos seres privilegiados: al fin y al cabo, ni siquiera es contagioso, y ojos que no ven, corazón...
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home