ampharou

jueves, septiembre 15, 2005

Veranillo.


El verano se va acabando. Ya me puedo empeñar en seguir tumbándome desnuda en mi terraza a la hora de comer por acaparar rayos de sol o en dormir con el único abrigo de una sábana y la ventana abierta. Por mucho que quiera retrasar el cambio de temporada en mi armario y el sacarle lustre a las botas. Aunque siga bañándome en el mar al atardecer y caminando descalza todo el día. Tarde o temprano tendré que dar mi brazo a torcer, mirar de nuevo los escaparates y encender las luces de la casa a media tarde.
Gracias a los cielos, todavía nos queda el veranillo del membrillo.
pensado por ana at 2:27 a. m.

7 Comments:

Quiero coordenadas para poder dirigir mi catalejo :)

15 septiembre, 2005 07:38  

"A Ana le gustaba estar morena
y se tumbaba cada tarde al sol,
nadie vio nunca una sirena
tan desnuda en un balcón.
Pronto en cada ventana hubo un marido
a la hora en que montaba el show la chica,
aunque en la tele diera en diferido
el Real Madrid - Benfica.

Ana tomando el sol,¡bendito descontrol!"

(De Sabina, por si alguien no lo reconoció)

15 septiembre, 2005 22:59  

Ya estaba aplaudiéndote hasta que he leído quién era el autor...

16 septiembre, 2005 00:53  

Pues a mi sí me ha gustado, muchas gracias. Beaumont, las coordenadas, según el google earth, en privado ;)

16 septiembre, 2005 01:15  

No, si decía que no he aplaudido porque al final no era suyo, sino de Sabina. Bonito, lo es un rato.

16 septiembre, 2005 11:59  

Quién fuera gorrión.

16 septiembre, 2005 12:07  

To el que quiera puede ser gorrión, ya lo he dicho muchas veces. Y mirar dónde quiera y con quén quiera.
Lo mejor de la despedida del verano es saber que esta esperando que pase un rato para volver al irse la primavera.
Mencanta el veranito del menbrillo.

19 septiembre, 2005 12:49  

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