ampharou

domingo, septiembre 09, 2007

Memoria de vacaciones: Exposición.

Alphonse Mucha.

O de cómo quedarse clavada al suelo y con la boca abierta ante un cartel publicitario.

Carteles publicitarios de finales del diecinueve y principios del veinte, claro, que no me veo yo parada y absorta ante un cartel de zumos pascual o uno de mutua madrileña.

Carteles modernistas, portadas de revistas, calendarios, los pertenecientes al Gabinete de Dibujos y Grabados del Museo Nacional de Arte de Cataluña desde que lo compraran a los coleccionistas Plandiura y Riquer.

Théophile A. Steinlen.

Una tarde en el precioso Palau Nacional (que por sí solo y por el entorno en el que se encuentra, ya es merecedor de una visita), bolígrafo en mano, anotando cada autor de esta muestra para que no se me escapara ninguno, para poder seguir ahondando en cada uno de ellos (bendito Google). Más de ochenta obras, algunas tan bellísimas como las de Alphonse Mucha, otras tan conocidas como las de Théophile A. Steinlen. Más de ochenta obras delante de las que no podía más que quedarme parada, intentando penetrar en cada sombra, cada color, cada trazo ondulante y cada composición.


Aleardo Villa.

La muestra permanecerá abierta hasta el próximo treinta de septiembre. Más información: http://www.mnac.es/doc/lan_003/Cartel_moderno.pdf

pensado por ana at 12:33 p. m.

6 Comments:

Ya no se hacen carteles así. El ordenadoro ha matado la creatividad artística.

un beso

10 septiembre, 2007 00:16  

Preciosos. El de Villa con la mujer tumbada, fumando, es una obra de arte.

Yo creo que hoy sí se hacen carteles así, sólo que la creatividad se manifiesta de otras maneras.

Saludos.

10 septiembre, 2007 08:51  

Siempre me quedé embobada mirando estas maravillas. ¿Sabes si editarán algo con las obras expuestas?
Besos.

10 septiembre, 2007 08:57  

Raquel, hay un libro de la exposición que puedes comprar en el MNAC (donde se hace la misma)

10 septiembre, 2007 09:51  

Gracias, Heliópolis, lo anoto. Un saludo.

10 septiembre, 2007 13:07  

Pues no, ya no se hacen estas maravillas, pero se hacen otras. Cada época utiliza los recursos que tiene a mano, en cada época somos herederos de las anteriores, pero también se intenta ir un paso(o dos) por delante. Ellos también lo hacían.
Por ejemplo, el cartel de los cigarrillos París (sí, es una autentica maravilla, Landhlauts,lástima que aquí no se aprecie del todo), esos colores planos del fondo y el vestido, esas flores tan 'dibujadas', y sin embargo el rostro de la mujer parece una fotografía... la lasitud de la pose contrastando con la sensualidad de la mirada... fue mi favorita absoluta!! (había unas camisetas preciosas con este cartel en la tienda del MNAC..
Raquel, el libro, que estuvimos ojeando en la misma exposición, tenía una pinta estupenda. De todas formas, el link que pongo es un documento que no está mal y donde puedes encontrar el nombre de otros autores presentes en la muestra, por si quieres bucear un ratico por los interneses ;)
Besitos a todos.

10 septiembre, 2007 22:18  

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